Plácidos pensamientos a tu sombra.
Tus manos.
Tu mirada.
Esa media sonrisa de luna tierna.
El olor de tu tabaco.
El sabor de tus tobillos.
Una camisa negra.
La hebilla fría de tu cinturón entre mis dedos.
El tacto de mis labios en tu pecho.
La suavidad infinita de tus nalgas en mi lengua.
El aroma de tu sexo.
Tu voz.
Tus silencios.
Tus silencios.
Esos pasos que adivino.
El contacto blando de la moqueta en mis rodillas.
Tus pies en mi espalda.
El peso liviano de la entrega.
La alfombra de mi melena.
Prados ensortijados de estrellas.
Rozar con los labios el suelo.
Deshojar los velos de mi danza en tus muslos.
La fuerza con la que tomas mi cabello.
Cabalgarnos en suspiros.
La chispa de un azote.
Los ojos de quien mira lo que es suyo.
El calor de mi sexo.
La palma de tu mano en mi rostro.
Caricias como pétalos. Pétalos blancos.
Columpiarse en las penumbras negras.
Los ocasos compartidos.
Mi naufragio entre tus dedos.
Traspasar los oscuros espejos.
La cara oculta de Alicia.
El precipicio de una vocal.
Saltar.
Un collar de perra.
El peso de una correa.
Tu negra cautiva.
Mi Dueño que premia y que castiga.
La cara dulce del abismo.
Tu abismo.
Una sonrisa compartida.
Pertenecerte.
Un juego a medias.
Dos caras de una moneda.
El encuentro de la orquídea gemela.
Mis gemidos recorriendo los pasillos.
Una orden.
El trance lúbrico de la palabra.
Sumergirse.
Bucearte.
Atraparme en ti.
Volar sin alas.
Precipitarme en las cadencias de tu nombre.
Ver cómo te conectas.
Oler tu nick.
Una flor virtual entre los dientes.
Saltarse las reglas.
El goce de las cosas prohibidas.
Subir a los infiernos.
Deslizarme en el fuego de tu cielo.
La batalla entre el orden y el caos.
Ganar y perderme en tu ausencia.
Saberte mío.
Un suspiro frente a un e-mail que se acaba.
Pensarte.
Volverte a pensar.
Versos de perra negra
Pura Salceda
*Fotografías: John Tisbury
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