miércoles, 2 de septiembre de 2009

Incesto



Lot salió de Soar (Zoar) y subió a la montaña, donde se radicó con sus dos hijas, porque tuvo miedo de quedarse en Soar. Allí se instaló con ellas en una caverna.




Lot y sus hijas, 1616_ Hendrick Goltzius



La mayor dijo a la menor:
-Nuestro padre ya es viejo, y aquí no hay un hombre que se acueste con nosotras, como se hace en todas partes. Vamos a emborrachar a nuestro padre y nos acostamos con él; así nos dará descendencia.
Aquella noche lo emborracharon, y la mayor se acostó con él, sin que él se diera cuenta de lo que sucedía.
A la mañana siguiente, la mayor dijo a la menor:
-Anoche me toco a mí dormir con mi padre; esta noche lo emborrachamos también, y tú te acuestas con él para que te dé descendencia.
También aquella noche emborracharon a su padre, y la pequeña fue y se acostó con él, sin que él se diera cuenta de lo que sucedía.





Lot et ses filles, 1640_Francesco Furini



Así, las dos hijas de Lot concibieron por obra de su padre.
La mayor dio a luz a un hijo, y lo llamó Moab (Paterno), diciendo: “De mi padre.” (Es el antepasado de los actuales moabitas.)
La pequeña también dio a luz un hijo, y lo llamó Ben Ammí (Poblano), diciendo: “Hijo de mi pueblo.” (Es el antepasado de los actuales amonitas.)


Génesis, 19, 30-38





Las concepciones eróticas arcaicas que muestra el Antiguo Testamento son turbadoras. ¿Quién no se siente conmocionado al leer cómo las hijas de Lot emborrachan a su padre y se acuestan con él?




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